miércoles, 3 de marzo de 2021

No hay nada escrito

Se siente muy bien cuando alguien te dice que haces bien una cosa.

Una cosa como cualquier cosa. ¡Buen trabajo! ¡Que buen desempeño! ¡No sabía que hacías eso! ¿Wow, qué haces allá? ¿Por qué haces esto? ¡No imaginé que hicieras eso!

Debes hacer lo que te dicte el corazón, por tradición o por convicción. 

Tu éres lo que haces.

Tu éres lo que siembras.

Tu éres lo que comes.

Tu éres lo que promueves.

Tu éres lo que pintas.

Tu éres lo que escribes.

No es el ser o no ser, como muchos con crisis existencial se preguntan en algún momento. 

Tu éres lo que haces.

 Tu éres lo que crees,

 y eso es suficiente.

Que si hiciste esto y aquello. No importa.

Lo que importa es lo que haces y continuarás haciendo.

Siempre hay errores, pero no debes dejar que tus errores te definan.

Siempre hay felicidad, pero no debes dejar que tu felicidad te defina.

Siempre hay tristeza, pero no debes dejar que tu tristeza te defina.

Siempre hay soledad, pero no debes dejar que tu soledad te defina.

Siempre hay un que será o un lo que fué, pero no debes dejar que tiempos ajenos al presente te definan.

Somos efímeros.

No hay nada escrito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario