jueves, 11 de febrero de 2021

El ciclo

Otro día, otro ciclo.
De un lado al otro, a la oficina, al bar, a la ceremonia, a la escuela, al gimnasio, los amigos, la pareja, los problemas.

El ciclo del bienestar, de la falsedad. De la comodidad del que vendrá, porque siempre es bueno hacer cosas para el futuro, para el presente. ¿Quién decide sino yo, que soy el actor de mi vida, para sobrevivir y disfrutar de ella? El ciclo termina, el ciclo se convierte en otro ciclo. Ciclo de incertidumbre, de no hacer, o de hacer solo por hacer.
¿Cuál es el punto? Rescatar al planeta, dejar la huella, perfecto. ¿Quieres una vida serena y calma, o una llena de aventuras? Hecho. ¿Una de ansiedad y retos diarios? Concedido.
La vida es complicada, no todo es dinero, pero necesito dinero. No todo es familia, pero necesito un abrazo, una caricia. No todo es sueños, pero necesito soñar,. Todo es balance, pero nadie vive en balance. 

El ciclo no es ciclo. El ciclo está ahí porque decidimos que hay ciclo.

El ciclo es conformidad. Es fácil estar en el ciclo. Es necesario.

La vida es encontrar el mejor ciclo. Donde podemos sacrificar fácilmente cualquier cosa, cualquier relación  y amistad, para ser felices, aunque sea por un momento.
Algunos días maldije al ciclo, otros días me sentí afortunado, muy afortunado del ciclo.

Es curioso, mucho de lo que queremos en el ciclo pertence a otro ciclo, como la escuela, la vida de jóven adulto, la vida aventurera, la vida enamorada, la vida en familia.

La vida es, de alguna forma, ajustar todos los ciclos, y es muy dificil ajustarlos a nuestras espectativas. Los ciclos que se fueron no vendrán.
Los ciclos que vienen no se sabe si vienen.
Y heme aquí, en el ciclo de la nostalgia, del que será, y del que fué.

En busca del camino

 Arriba y abajo, dirección.
Conscientes de la meta, sin preguntarse si es el mejor camino.
Derecha o Izquierda. Solitud.
¿Quieres compañía? Puedes encontrar el camino por ti mismo. Ese no es el problema. Podrías encontrar el camino con alguien más y sentirte igualmente solo.

La incertidumbre es universal. ¿La solución? Compartir el camino, compartir la vereda. La vida es muy corta para encontrar al perfecto aventurero que sabe para donde ir.